Admiro la creatividad y, aún más, a la gente que la hace. A los que se suben a un escenario frente a mucha gente y hacen lo que les apasiona, independientemente de si lo hace mejor o peor. Hay que tener mucho valor para hacer esto; y siempre deben ser aplaudidos. A los que escriben y publican sus cosas, a los que pintan, a los que componen, ya sean versos o canciones.
Pero lo que no admiro es lo mal recompensada que está la creatividad. Para unos es fuente de ingresos, y para otros una afición que, a veces, les cuesta hasta el dinero; pues el tiempo invertido nunca se cuenta, se cambia gratuitamente por ilusión. Y en muchísimos casos, la diferencia entre unos y otros está marcada por una línea tan delgada, que es casi imperceptible.
No te compliques la vida. los genios más grandes murieron pobres totales. Tú crea y nunca pienses en lo económico. Será feliz
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